Ven aqui y no te arrepentiras

Me he mudado a http://humano.ya.com/untied Allí, aparte de mi blog, podréis encontrar las recetas de Anamari

Martes, 25 de marzo de 2.003

Hacía tiempo que no escribía. Es que cuando me compré el
ordenador nuevo dije que iba a escribir todos los días, pero fíjate por donde ya
se me han pasado dos. En estos dos días tampoco pasó nada interesante, salvo que
el domingo fuimos a casa de Osama Carmen, Patricia y yo a ver los Oscars y me
gustaron mucho. La ceremonia fue muy corta, no como otros años que llega a
aburrir, y encima le dieron el Oscar a la mejor canción original a Eminem, ídolo
de masas donde los haya, y eso que estaban nominados U2 y Paul Simon. Ya era
hora de que dieran este Oscar a un joven, y no a una dinosauria como nos tienen
acostumbrados.

Hoy tampoco he hecho nada así fuera de lugar. Patricia y yo
íbamos a ir al cine a ver "8 millas", pero resulta que ya sólo la ponen en un
cine y está en la periferia de la periferia, así que nos hemos ido a ver
"Chicago". A mí me ha encantado, porque me encantan los musicales y la trama,
aunque ya la conocía, me parece lo más grande. Es algo así como "Si no puedes
ser una estrella, por lo menos hazte famoso". Creo que define mucho el tiempo en
el que vivimos. No hay más que echarle una ojeada a los programas de Telecinco
con exconcursantes del Gran Hermano, exguardiaciviles, excantantes infantiles y
drogadictos haciendo las veces de periodistas y "stars media". Yo no sé el resto
de la población, pero a mí lo que opinen toda esa panda de contertulios baratos
me la trae al pairo. Por eso veo tan poco la tele últimamente. A lo que iba, que
"Chicago" genial, ha hecho balanza con "Kárate a muerte en Torremolinos",
necesitaba una superproducción americana para contrarrestar el mal sabor de boca
que me dejó la otra.

Después de la peli hemos ido al Vips a hacer una merienda-cena
de las nuestras. Patricia se ha tomado una quesadilla sin tomate y lo que ponen
por encima y yo una ensalada oriental y hemos compartido una ración de
cocretitas, como está mandado. Durante la merienda-cena hemos hablado de Nassau,
de lo atormentado que está el pobre y de las desgracias que le pasan. Yo creo
que tiene un mal de ojo o algo de eso. También hemos hablado de colegios
franceses, porque Patricia estudió en el Liceo Francés y yo fui profesor de
español en Francia. Nos hemos acordado de los Cahiers d'Identité, del CDI, de
los forfaits del comedor, y de un largo etcétera. Hay que ver lo distintos que
son los colegios en Francia. Se nota que ellos son más sofisticados, y para
prueba un botón: llaman CDI (Centre de Documentation et Information) a lo que es
la biblioteca. Eso es sofisticación y a ti te encontré en la calle. Ai, no,
quería decir "Eso es sofisticación y lo demás son tonterías". Ahora sí. Es que
no me gusta borrar lo que ya he escrito.

Cuando he llegado a casa me he puesto a ver "Un pasito p'alante",
pero como ya llevaba una hora de emisión no me enteraba de nada, así que he
decidido ponerme a escribir esto. La verdad es que no estoy muy lucido, me duele
la cabeza y la garganta. Creo que me estoy costipando o, lo que es peor, creo
que tengo neumonía. Creo que me voy a la cama.

Sábado, 22 de marzo de 2.003

Hoy por la mañana lo único interesante que he hecho ha sido
limpieza. Me he levantado prontito, porque ayer no salí, y he decidido ponerme
la cofia y dedicarme a limpiar. Porque sé limpiar, como se encarga de recordarme
el Ministerio de Asuntos Sociales, así que como sé limpiar, pues limpio. También
sé bailar sevillanas, pero ayer no me dio por ahí.

Por la tarde quedamos para ir a la manifestación. Todavía no he
ido a ninguna manifestación contra esta guerra, porque todas me han pillado
trabajando o en Granada, así que tenía muchas ganas. Nos hemos presentado en
Moncloa y hemos hecho todo el recorrido hasta la Puerta del Sol. De las
consignas que hemos cantado, mis favoritas han sido: "Aznar, te toca, el cinco
de copas", por su originalidad y su adaptación a los nuevos tiempos y "Hasta las
pelotas de tantas gaviotas", porque me parece mucho más transgresora que el "Ito,
Ito, Ito que se caiga el pajarito", que nunca me ha gustado. Ya en la Puerta del
Sol, Patricia había
quedado con Tori y allí estaba con Sergi Ibañez, el NoNos, Lokas Arroz y pareja,
y un largo etcétera. Esto demuestra que los modernos de Madrid, bueno, de
Barcelona pero que viven en Madrid, también se manifiestan. Y, claro, los
modernos no se van a manifestar así de cualquier manera, ellos se manifiestan
con una pancarta hecha en tela de leopardo que dice "EXCOMUNIÓN" y con las
letras con los colores de la bandera del Vaticano. Sin duda, la mejor pancarta
de toda la manifestación. La protesta no está reñida con el estilo.

De la manifestación nos hemos ido a cenar a un chino. Era un
chino muy gracioso porque había chinos comiendo. Es la primera vez que veo
chinos comer en un restaurante chino, así que me ha inspirado mogollón de
confianza. De todo lo que hemos comido, lo que más me ha gustado ha sido el
pollo con piña fresca, que no "pollo con piña, fresca", y la tempura china, que
es igual que la japonesa, pero china. Durante la cena hemos hablado de todo,
desde un sex simbol inglés que sólo Lukas conoce hasta el viaje a las islas
griegas de Sergio Ibañez, Lukas y Buenavista, pasando por el No-Logo, la guerra
y las baladas que ponían antes en las discotecas. Ni que decir tiene que lo que
más me ha interesado ha sido el famoso viaje, porque yo sabía que habían estado
pero no conocía los detalles, y a mi unas vacaciones de Buenavista pues me
interesan mucho. Fueron a una playa que se llamaba ParadiseSuperParadise y que
era muy gay. Tiene que dar un poco de miedo. Se bujjjcan tres maricas muertas
ahogadas vivas en ParadiseSuperParadise.

Después del chino teníamos pensado ir a ver "Kárate a muerte en
Torremolinos", y eso hemos hecho. El cine estaba en una zona que me daba un poco
de miedo. Estaba convencido de que nos íbamos a encontrar el cinco de copas en
algún rincon, pero, afortunadamente, no fue así. La peli no me ha gustado mucho,
porque yo me la esperaba más graciosa. No sé, había cosas que tenían gracia,
pero tampoco es para tanto. No debían tener la misma impresión unos que había al
fondo de la sala que no paraban de reírse. Yo me esforzaba por entender de qué
coño se reían, pero por más que lo intentaba, no lo conseguía. Lo mejor de la
peli: el final y el espíritu chino que enseña kárate a los surferos católicos.

Del cine hemos ido a dejar a Lukas y Dani en el Vips, porque
iban a pillarse otra peli, que se habían quedado con ganas de más cine, después
a Patricia en su casa y a Carmen en la suya y yo me he ido a la mía. Así es como
deberían acabar todas las noches: cada uno en su casa y Dios en la de todos.

Jueves, 20 de marzo de 2.003

Me he levantado muy muy tarde porque anoche me tiré hasta las 4
de la mañana con Patricia
por la webcam. Es muy gracioso porque nos ponemos la webcam para mirarnos a
nosotros mismos, es decir, yo me miro a mí y Patricia
se mira a ella. En todo ese tiempo también estaba conectado a IRC y un chico me
dijo que si le dejaba verme, que me mandaba una foto y blablabla, y yo le dejé,
porque si sólo dejo a Patricia
verme por la webcam, pues no tiene sentido tener una webcam. Me mandó la foto y
bueno, no estaba mal, pero luego hablando descubrí que era un chacho de mucho
cuidado, de esos que llevan pantalones ajustados, camisas arrugadas y frecuentan
el Pasadroga, así que decidí cortarle, porque para ligar con un tío así no
necesito webcam, sólo necesito quedarme un rato en la esquina del Nike y alguno
cae fijo. También hice con Patricia
un concurso de pollas, que consiste en meternos en Eyeball, que es un chat con
webcams, contar hasta tres y ver quién es el primero que consigue que alguien le
enseñe la polla. Es muy divertido, aunque no lo parezca, y se tarda menos de lo
que podáis imaginar, normalmente no tardamos ni un minuto. Eran las tres de la
mañana, había estallado la guerra, y yo estaba haciendo un concurso de pollas en
el Eyeball. Los bombardeos americanos siempre me pillan en el lugar más
inesperado: el de Afganistán me pilló en el bingo y el de Irak me ha pillado en
pleno concurso de pollas.

Nada más levantarme decidí que quería ver Grease, así que me la
puse. Comí, y seguí viendo Grease. Y llegó mi hermana contandome lo de la
guerra, que yo ni me había enterado de que había empezado, pero seguí viendo
Grease, porque no me apetecía nada ver los especiales informativos que suelen
poner cuando ocurren estos acontecimientos. Me duché y decidí vestirme de
reservista, porque si al gobierno le da por mandar hombres al campo de batalla
yo puedo ser uno de ellos, aunque no haya hecho la mili, así que me puse las
botas militares y la camiseta de Zortex con los galones y todo, no vaya a ser
que me llamen para salir corriendo hacia Irak y me pillen con una camisa y unos
zapatos, tengo que estar preparado.

Me fui a currar y me lo pasé muy bien. Primero viendo a la
policía que estaba enfrente del videoclub parando coches y multando a to cristo,
y yo como buen cotillo que soy pues me tiré dos horas en la ventana viendo como
la policía hacía su trabajo (ejem). Después vinieron Carmen y Patricia
a verme porque habían estado en la pelu de mi hermana. Carmen está fatal. Hace
de conejilla de indias probando medicamentos y estaba muy eufórica ayer, porque
ahora está probando unos antidepresivos, y debe ser por eso. El caso es que la
tía no para de preguntar "¿y por qué haces eso?, ¿y por qué haces lo otro?", de
saludar a todo el mundo, de aprenderse las promociones, vamos, que si se
descuida la doy un polo azul y la pongo detrás del mostrador. Nos comimos una
pizza y se fueron. Cuando ya cerramos el videoclub nos fuimos al Karaoke porque
era el cumpleaños de un compañero, y nos lo pasamos de puta madre, o por lo
menos yo. A ver, canté "Marta tiene un marcapasos", "Twist and shout", "Chanel,
cocaína y Don Perignon", "A quién le importa", "El imperio contraataca" y como
colofón final subimos todos a cantar "Europe's living a celebration", que es un
temazo pero que en versión karaoke pierde mucho, porque la han ralentizado y
queda muy sosa.

Cuando llegué a mi casa mi madre me dijo "Vamos, ya es hora, que
llevo despierta desde las 5.30 a ver si venías. Hueles a vino". Me encanta
cuando mi madre me dice "Hueles a vino", porque la tía no acierta ni una. Cuando
no bebo me dice "Hueles a vino" y cuando llego dando tumbos por el pasillo no me
dice nada. Yo creo que mi madre no sabe muy bien a qué huele el vino.

 

Miércoles, 19 de marzo de 2.003

Hoy es mi santo. Me encanta que sea mi santo porque me llama la
gente para felicitarme y como pasteles. Yo no entiendo por qué me felicitan en
mi santo, ¿qué mérito tiene llamarse José, llamarse Florentino o llamarse Perry?
Que me feliciten el día de mi cumpleaños, lo entiendo, porque el día que nací
fue como una bendición divina, como el principio de una nueva era, ¿pero el día
de mi santo?. Además, nadie me felicita el 1 de enero, que también es mi santo,
porque yo tengo dos santos: San José y Santa María, y Santa María es el 1 de
enero, pero todo el mundo está muy ocupado felicitándome el año como para
felicitarme también el santo. Demasiadas felicitaciones en un solo día, os
entiendo a todos. Bueno, a lo que iba, que no tiene ningún mérito llamarse José,
si acaso el mérito sería de mis padres, pero tampoco se les puede felicitar a
ellos porque a mi hermana la llamaron María José y a mí José María, así que no
les deben elogiar la originalidad, que sin duda no tuvieron. Aún así, a mi me
encanta mi nombre, porque es un nombre compuesto, que da como seriedad: José
María; suena a esas señoronas del barrio de Salamanca que compran el periódico,
llevan pañuelos anudados al cuello y se acuestan con jovencitos. José María, es
nombre de alto cargo en una empresa o de pintor famoso, aunque no vanguardista,
ni mucho menos. Pero también me pueden llamar de manera informal: Chema, que es
como de andar por casa, como de adolescente al que le encanta el fútbol y se
pirra por los móviles y las chicas con pantalones de campana. Vamos, que mi
nombre creo que no me define mucho, pero me encanta.

Hoy me ha llamado Patricia, me ha dicho que se está acabando el
libro de Alaska y que le encanta. A mi también me encantó ese libro. Hablando
del libro hemos pensado que los Costus vivían en la calle La Palma, y Thales
también vivía en la calle La Palma, así que lo mismo era la misma casa. Fíjate
que lo mismo he estado follando en Casa Costus y yo sin darme cuenta. La verdad
es que es algo que viste mucho: "Yo follé en Casa Costus" y, aunque no esté
seguro de haberlo hecho, voy a decir que sí, que he follado en Casa Costus, y
que cuando Alaska sale de un concierto Patricia y yo la damos la espalda
mientras los fans la piden autógrafos (que ya lo hemos hecho alguna vez), porque
Alaska es un famoso de andar por casa, algo así como el Chema que adora el
fútbol, se pirra por los móviles y le molan las chicas con pantalones de
campana.

Creo que me voy a dar una sesión de Webcam, que me lo pide el
cuerpo.

Martes, 18 de marzo de 2.003

Hacía tiempo que no escribía por aquí. Hacía demasiado tiempo
que no escribía por aquí. La razón es muy sencilla: por fin jubilé mi antiguo
ordenador, un portátil que me regaló Dani, el ex-novio de Alicia, y que al
principio era como el mejor ordenador del mundo, con DVD y todo cuando ni
siquiera vendían DVDs, pero ahora se ha quedado un poco obsoleto, y me he
comprado un ordenador que no sé si será bueno o no, pero por lo menos no se me
queda colgado y me va muy rápido. Bueno, la razón por la que me va muy rápido es
porque me he enrolado en la banda ancha y me he dejado de mariconadas y de
ruiditos de módems. El caso es que el ordenador nuevo venía con todo tipo de
lujos y confortabilidades (si es que se dice así), ai, no, comodidades, así sí
que se dice, pero no traía el Office, y no tenía ningún editor de páginas webs,
y con el editor cutre que te ponen en el blogspot pues me salían los posts (o
postes) descolocados. Así que, pues para escribir así, mejor no escribo.

Pero ya tengo Office, como la gente normal, y ya puedo escribir.
Mañana es mi santo, así que espero que alguien me felicite. De momento mi madre
ya me ha felicitado a las 12 de la noche en punto, y ha dicho: "Ya que es tu
santo, me voy a tomar una copita de Baileys". Sí, es mi santo, pero al final no
se ha tomado la copita de Baileys porque yo estoy supervago y me duele mucho el
cuello y creo que tengo meningitis y no me apetecía levantarme a ponerle el
Baileys, y mi madre ha dicho que si no se lo ponía yo como invitación no se lo
tomaba, porque se sentiría como una borracha.

Bueno, pues me voy a la cama. Que aunque mañana sea fiesta y sea
mi santo, tengo que trabajar, y encima de mañana.

 

¿Sábado 22 o domingo 23 de febrero de 2.003?

Pues aquí estoy, las 6 de la mañana del domingo y me acabo de
levantar. La razón es muy sencilla, el viernes fue una noche brutal,
prácticamente no dormí, y ayer me acosté a las 9 de la noche, así  que
me he despertado extremadamente temprano, pero más fresco que una lechuga.

El viernes no fue así. Me levanté a las 3 de la tarde, ni más
ni menos, comí y me puse a ver "Las reglas del juego". Una película
que me encantó porque me sentí muy identificado con Paul, un personaje gay que
siempre se pilla por un hetero. A mi me pasa lo mismo. Después chateé un rato,
me metí con un par de indeseables en un par de foros y cocreté mis citas para
el viernes: con Carmen en Plaza Castilla, con Iván y Osama en Bernabéu y con
Patricia, que no iba a salir, en Nuevos Ministerios. De allí nos dirigimos a
Tribunal, donde habíamos quedado con Rubén para ir a la fiesta de que las
breakers daban en su casa, y hacia allí caminamos. Al llegar a la Gran Vía
decidimos echarnos un Dance Dance Revolution y nos eliminaron a la segunda
canción: estamos perdiendo las buenas costumbres. La casa de las breakers
estaba llena de guiris, italianos en su mayoría, y también de tunos. Lo que
pasó en esa fiesta está muy bien explicadito en el diario de Patricia.
Fue brutal: obligamos a los tunos a cantar los Clavelitos, tuvimos un pequeño
"vis a vis" con uno de ellos, hicimos callar a la gente para poner la
Bomba y nos fuimos amenazados por un vecino que iba a llamar a la policía.
Vamos, que una vez más fuimos los reyes de la fiesta.

De allí nos fuimos al Ochoymedio, que
pinchaba Buenavista. El Ocho se petó como suele hacerlo últimamente, o lo que
es lo mismo, había mucha gente pero muy pocas personas. La session estuvo de
puta madre, aunque yo creo que Javi se pasó repitiendo del "Danger! High
Voltage" y el "Blue Monday". Debió traer pocos discos, porque ni
siquiera trajo a Britney Spears. Buenavista está evolucionando, igual que el
Sinpa ha evolucionado al Minimal-techno. Bueno, no me funcionan los acentos.
Habia un niño muy mono con una camiseta de McDonalds ÑAM, pero claro, era
hetero y ademas se habia pillado por Carmen. Era muy majo, pero un poco
pequeño, no habria cumplido aun los 19 años, y hetero, como siempre, como le
pasaba a Paul en "Las reglas del juego". La salida del Ocho fue uno de
los mejores momentos de la noche. Mientras esperabamos a que salieran Carmen y
Patricia, Ivan, Osama y yo criticamos a la gente que salia, porque eran la
mayoria criticables. Una vez todos fuera decidimos contarle a Buenavista que
habiamos estado en una fiesta con tunos y yo decidi enseñarle mi tarjeta del
Vips con su nombre. El me dijo que "eso es muy fuerte", pero yo no
creo que sea para tanto. Lo mismo se cree que solo tenemos tarjetas del Vips con
su nombre, pero tambien tenemos a nombre de Pitita Ridruejo, Soffy O y Courtney
Love, asi que no creo que sea tan fuerte como dice.

De alli autobus a Plaza Castilla y coche a
Alcobendas, dormi un par de horas y me fui a currar. Cuando sali de currar el
sabado me vine para mi casa y me acoste.